This is boring! [Hermanos Malfoy]

No era la primera vez que ocurría esto. Desde temprano por la tarde me perseguían diciendo "hoy saldremos, arreglense bien" a cada hora y a cada minuto. Obviamente, luego de un rato dejé de prestar atención a eso. Cuando la noche se acercaba ocupé el lugar del baño primero porque me demoraba horas en arreglarme, lo admito. Por una parte era muy chistoso hacer demorar a mis hermanos y que se enojen. Pero por otra, el castigo luego me llegaba a mi.
No sabía aún donde nos llevarían a todos pero de seguro sería un lugar con mucha clase por como nos hicieron vestir. Al llegar nos encontrabamos en la entrada de una casa literalmente gigante. Parecía de las típicas casas antiguas llenas de fantasmas y que tienen muertos enterrados en un sótano. -Bonita casa- susurré antes de que entráramos completamente en ella. Era sofocante la cantidad de personas con traje que había, luego de 2 minutos ya me quería ir. Mis padres desaparecieron junto a mi hermano mayor entre la multitud, quedábamos solo Orion y yo así que lo tomé del brazo y nos fuimos al primer sofá que encontré. Meseros, o algo parecido, pasaban con comida y tragos pero rechacé todo lo que me pusieron por delante. No había visto a personas de nuestra edad y probablemente seamos los únicos. -Que lindo es estar aquí!- dije con un poco de sarcasmo. -Hemos estado una eternidad acá- lo se, estaba exagerando y hasta yo misma sabía que recién llevábamos casi 5 minutos. Crucé una pierna sobre otra y me apoyé en el respaldo del sofá a esperar las siguientes 4 o 5 horas que nos quedaban para irnos.

Yo no quería tomar nada con alcohol pero Orion ya me había sacado una copa de algo para tomar, solo di unos pequeños sorbos y mantuve el cristal en mi mano por el resto del rato o hasta que me vuelva a dar sed. -Creo que cuando piden a los hijos de los Malfoy's se refieren a Scorpius y le agregan el plural a "hijos" solo para que no nos sintamos mal- nombré de mala gana el nombre de mi hermano mayor, no es que nosotros fuéramos menos importantes pero siempre querían cosas proveniente de el y eso a veces me hacía enojar. YO soy la princesita, YO debería estar en su lugar. Miré a Orion y alcé una ceja refiriéndome a lo de "más rico" -Si hermano... Como tu dígas- sabía que si le contradecía entraríamos en una discución si fin. -Claro, yo feliz- me tome mi tiempo para pararme y caminar. Aún tenía mi copa en la mano y entrelacé mi otro brazo con el de mi hermano para caminar entre toda la gente que había. Miré para todos lados en busca de mis padres pero nada. No estaban ni cerca.
Llegamos a un estilo de terraza la cual no había nadie pero de todas maneras estaba preparado para ser habitado. -Me gustan este tipo de eventos pero.. Con personas más jóvenes- hice una mueca al ver muchas personas de edad por todos lados. No les haría mal unas operaciones para estirarse la cara y rebajar un poco la grasa del abdominal. Si tanto dinero tienen, ocupenlo en lo que realmente se necesita, en uno mismo.

No estaba de acuerdo con el punto de Druella, posiblemente Scorpius tenía a muchos más con quien hablar que nosotros, pero estaba seguro que eran por razones mucho más allá de lo que podía llegar a interesarme, sabía que mi abuelo eran partidario de Lord Voldermort, así fue mi padre, y de vez en cuando teníamos conversaciones acerca del tema, yo como siempre, era lo bastante despistado como para no colocarles tanta atención, pero sabía de lo que trataba. Scorpius al ser mayor de edad y salir de Hogwarts, de inmediato se vio tapado de secretas y misteriosas reuniones. En aquella fiesta en la que estábamos metidos, estaba seguro que con los tipos que hablaban nuestros padres y hermanos no eran simples ricachones, eran seguramente aquellos tipos con el ideal mortífago de por medio.- ¿sabes por qué nos quieren aquí? - le pregunté enarcando una ceja volviéndome a ella.- porque todos estos viejos y viejas ricachones buscan chicos que se comprometan con sus hijas o hijos, o nietos y nietas... somos bastante codiciados por ello.- me hundí de hombros mientras miraba hacia los demás lados.- claro que encuentro una injusticia que nos traigan a nosotros y no a las señoritas...- una sonrisa ladeada dejando la copa casi ya terminada en una mesa de madera algo anticuada.

Me coloque de pie, Druella estrecho su brazo en el mío y camine junto a ella hacía una gran puerta abierta que daba paso a algún tipo de terraza que daba al jardín. No me ocupe de mirar en busca de nuestra familia, sabía que ellos no se ocuparían de si estábamos siquiera vivos hasta algún tiempo más.- prefiero en donde haya jóvenes- coincidí con ella- pero también que haya alcohol de verdad, música de verdad, chicas de verdad y droga de verdad... recién así podría divertirme algo.- comenté mientras apoyaba mi cuerpo en una baranda de cemento que daba a la vista a un jardín bien iluminado, no podía decir que no me gustaba aquello, si no fuera por esa fiesta, estaría en mi habitación haciendo... nada. Acá al menos podía escuchar la forma en que elogiaban a la familia Malfoy, aunque en realidad.... aquella "fiesta", si se le podía llamar así, estaba siendo todo un fracaso.

-Querido, hoy habrá otra reunión- Levante la vista de mi libro y me encontré con la gentil sonrisa de mi madre. Sus palabras eran puros susurros y siempre aparentaba estar relajada, transmitiendo de una u otra forma aquella sensación. Una de las mejores elecciones que había tomado mi padre en la vida era haber escogido a mi madre como su esposa.
Solo asentí y regrese mi vista al libro. Mis padres, principalmente mi padre, me recriminaban sobre que no me interesaba demasiado en los "asuntos de la familia", pero olvidaba que desde que había terminado mis estudios solo le dedicaba tiempo de mi vida a las reuniones que cada vez eran mas cotidianas.
En ese instante cruzo por mi mente mi hermana y sin titubear me levante para dirigirme al baño. Golpe con la palma de mi mano la puerta de aquella habitación molesto; Druella ya se había adueñado del sitio.
Regrese a mi cuarto y busque entre el armario algún traje para ponerme. Era evidente que debía de ir perfecto, ya que a la mas mínima falla te convertías en el centro de critica.

Pasadas las horas ya nos encontrábamos en la fiesta. Mis hermanos odiaban aquellos eventos y no lo ocultaban. De pequeño también los odiaba, ya que las mujeres adultas no se cansaban de utilizar mis mejillas como su juguete y en decirme que sus nietas serian mis prometidas algún día. Gire hacia la derecha cuando volví a la realidad, quedando separado de mi familia, pero también fuera de la vista de aquella joven que en todas las fiestas me solía acosar. Era un caballero y me gustaba tratar a las damas como algo apreciado, eso no quitaba que sea "cariñoso" con todas, pero aquella chica lograba arruinar mi tranquilidad en pocos segundos así que siempre intentaba huir de ella, pocas veces resultaba.
Me pare en seco al encontrarme con un matrimonio de alto prestigio. Los salude y rápidamente el hombre me comenzó a contar sobre sus negocios y futuros planes. Siempre entablaba conversación con el así que conocía que agregar en el momento justo, podía decir que realmente aquel señor de tez sumamente blanca me había llegado a aprecia tanto como a su propio hijo. Mi sutil sonrisa se esfumo cuando apareció aquella joven que tanto me "perturbaba".
-Ohh, llegas en el momento justo, hija- Las palabras de aquel señor corrieron por mi cuerpo ocasionandome un escalofrió. Mi padre me había comentado que aquella familia quería que me comprometiera con su hija y mi padre estaba de acuerdo, pero.. no, no era para nada mi tipo.
Intente no perder la paciencia y en planear una excusa perfecta para desaparecer de allí mientras notaba como aquella chica hacia todo lo posible para llamar mi atención. Mi vista se encontró con mis hermanos quienes parecían buscar un lugar alejado del resto.. alejado de la joven..
Me disculpe con ellos diciendo que debía de buscar a mis hermanos y antes de recibir alguna objeción me marche.

-No esperes que aquella "diversión" venga por ti, hermano- Le respondí al comentario que le hacia a Druella. Era verdad que había perdido todo tipo de relación con mis hermanos o un interés notorio. Pero sabia que nada les faltaba y veía adecuado dejarlos que se diviertan, ya que pronto todo eso se les acabaría. Me apoye sobre las barandas de aquella terraza y observe el lugar. Estaba convencido de que era el mejor lugar de la mansión o eso creía luego de haberme dedicado en recorrer toda la mansión.
Observe detalladamente al par de rubios y me acerque al menor.
-Primero, deberías aprender a vestirte- Comente en forma burlona y le acomode la corbata. Estaba seguro que esa vestimenta no era la escogida por mi madre, pero era normal aquel comportamiento en él. Mire a Druella y estaba tan perfecta como mi madre. Le guiñe el ojo y volví a recargarme contra la baranda.

Justo iba a decir un comentario respecto a lo que Orion dijo, pero me sorprendió al escuchar la voz de Scorpius, giré mi cabeza para verlo pero no demostré mucho interés en que el estuviera aquí. Había perdido la mayoría del cariño que le tenía porque nunca lo veía y si lo hacía, era una vez a las mil quinientas. Odio cuando una persona se separa de sus seres queridos, aún que nuestras personalidades sean completamente distintas, no debió haber hecho eso. Ahora es solo una persona más. Suspiré y dirigí mi mirada hacia la oscuridad que provenía del otro lado de la baranda frente a nosotros para pensar que rayos hacíamos los tres juntos en un mismo lugar.
Cuando Scor le arregló la corbata a Orion, no pude evitar reírme a carcajadas -Orion nunca aprendió a vestirse- y no era broma, la mejor vestida de la familia era yo, tenía el mejor sentido de la moda. En cambio ellos... uff! Nos encontrábamos los tres mirando la nada, al lado de la baranda. Me recordaba a como era "antes" si se podría llamar así. Era uno de esos momentos en los que tenía que decir algo chistoso, si yo me río, entonces es chistoso -Orion...eres adoptado- me mantuve seria todo el rato, lo miré por la cuenca de mis ojos pero luego los volví a la oscuridad. Como era el menor y de distinto color de cabello (independientemente de nuestra madre) siempre comento lo mismo he intento convencerme de que lo es. Los únicos rubios aquí era Scor y yo.

Sentí una voz a mis espaldas y la reconocí de inmediato, como no, si la había oído desde mis principios. Alce una ceja y sonreí levemente a modo de saludo, si bien nos habríamos topado en el recibidor de nuestra propia casa para partir, y nos habíamos venido juntos... no habíamos intercambiado palabra alguna.- ¿para qué? los mejores momentos se pasan sin ropa, querida hermana.- bromee sonriendo de lado mientras aflojaba un poco la corbata que Scorpius había arreglado, pero manteniendola en orden.

Habría sido un buen momento para entablar una buena conversación, casi nunca se nos daba aquella instancia de estar los tres, solos, y con infinidad de tiempo para ocupar, aunque posiblemente el mayor iría de vuelta a la fiesta en cualquier momento. Iba a preguntarle a mi hermano por qué razón había ido allí, con nosotros, en una de aquellas reuniones era típico que sólo entraramos juntos y luego salieramos juntos, él y nuestros padres se perdían entre la multitud, o quizá Druella y yo lo hacíamos. Iba a consultarle aquello cuando Druella salió con uno de sus disparates, me volví a ella con expresión fingidamente aburrida.- ¿ah, si? entonces la familia Malfoy hizo una buena elección al elegirme- le seguí el juego mientras guardaba mis manos en los bolsillos del pantalón con gesto indiferente- me has dicho aquello desde que tengo conciencia, Druella, creo que cuando era un niño pude habermelo creído y hasta atormentarme por ello, pero ya no sirve.- mis labios se formaron en una mueca y me hundí de hombros levemente.

Alterne mi mirada entre Scorpius y la entrada que había al gran salón de la casa en donde se hallaba la mayoría de los invitados, de pronto recordé lo que le iba a preguntar.- no te ofendas, hermano, aprecio tu compañía pero... ¿qué haces metido aquí? ¿no tienes importantes contactos allí dentro que claman por tu compañía y una aburrida conversación?- fruncí el ceño interesado en su respuesta, era claro que no me hallaba interesado en todo lo que hablaban allí dentro, pero según mi padre y el abuelo, debía comenzar a hacerlo. Y según Scor, debería coger más responsabilidades y todo aquello, aunque a responsabilidades se refieran a estar parados asintiendo a todo lo que dijeran viejos y gordos hombres que alucinan con ellos mismos y sus tantas posesiones.

Off: Druella, deberías cambiar el título y agregar a Scor, o colocar "hermanos Malfoy" o algo por el estilo xD